Mamarazzi 101: Cómo hacer retratos de familia en casa

¡Hola! Bievenido/bienvenida de nuevo a mi blog sobre fotografía familiar. Un blog diseñado para que conozcáis un poco mejor el mundo de la fotografía infantil y de familia. En especial a ti, que te tomas en serio hacer retratos infantiles a tus peques o conservar las mejores memorias de tu familia. Para ti sabes que puedes consultar mis entradas al blog dedicadas a ti como mamarazzi (pincha en enlace para ver estas entradas específicas).

He hecho esta entrada específica en este mes tan raro, el de Marzo del 2020 (por si resulta que lo lees un poco más tarde). Es fácil intuir que estas semanas que estamos viviendo van a quedar grabadas en la historia de la humanidad. ¿Es curioso, no? Nos podríamos imaginar que aquellos a los que les tocó vivir grandes acontecimientos históricos lo pasaron con mucho dramatismo y acompañados por una épica casi de película. Y sin embargo lo más probable es que la vida de la gran mayoría durante esos hitos históricos se asemejen a lo que nos ha tocado a vivir ahora: cada uno de nosotros intentando acoplar de la mejor manera lo que está pasando, con nuestras propias preocupaciones mundanas, quehaceres y rutinas descolocadas.

Esperemos que para casi todos nosotros todo esto pase como un periodo donde tuvimos que estar enclaustrados en casa junto a nuestras familias. Al menos ahora no te queda más remedio que pasar tiempo en familia e invertir en ella unas energías de las que normalmente no disponemos. Por fortuna, dentro de tanta gravedad, lo que esta crisis nos está obligando es precisamente a pasar más tiempo con las personas que queremos.  

Un momento casero de los que vamos a tener muchos estas semanas puede ofrecerte una oportunidad genial para hacer un retrato… bonito y con olor a Nenuco.

Un momento casero de los que vamos a tener muchos estas semanas puede ofrecerte una oportunidad genial para hacer un retrato… bonito y con olor a Nenuco.

Como fotógrafo de familias me ha tocado parar toda mi actividad y quedarme en casa. Pero eso no significa que pare de hacer fotos, porque puedo aprovechar para dar un empujón a un par de proyectos personales o incluso aprender alguna técnica nueva. Pero además puedo tratar de aportarte un pequeño granito para aliviar esta situación con algunas sugerencias e ideas para ayudarte a realizar proyectos creativos caseros con la cámara y en familia. Puedes aprovechar este tiempo de clausura para entretenerte haciendo sesiones de fotos en familia. Aprovecha para practicar tus dotes de Mamarazzi, idear proyectos fotográficos y por qué no, hacer unas fotos de familia para poder mandar a toda esa otra parte de la familia que ahora no vas a poder ver durante un tiempo. Puede ser una manera de ayudar mantenerte más unido y subir la moral de los abuelos. Y, por qué no, hacer unas fotos de familia o unos retratos infantiles con los que recuerdes en un futuro estas semanas donde pasaste tanto tiempo en familia. 

Así que, voy a aprovechar que estás en casa para, primero, darte unos pequeños consejos de cómo hacer fotos en casa y sacarles el mejor partido. En un segundo post justo después de esta entrada de blog tienes otra con ideas para hacer proyectos fotográficos en casa. Porque en tu hogar tienes muchísimas posibilidades para sacar unas fotos espectaculares, ya sean bodegones o retratos infantiles. Solo tienes que saber dónde está la mejor iluminación de la casa (nadie mejor que tú para saberlo), y darle vueltas a tu imaginación para crear algo que normalmente no tenéis mucho tiempo para hacer. Aprende a identificar la mejor fuente de luz, y cómo cambia a lo largo del día. Y cuando hablo de fuente de luz para hacer fotos no me refiero a las artificiales. Si puedes, evítalas, incluso apágalas. Piensa en términos de luz natural, porque es la mejor de las fuentes de luz. Cada ventana puede equivaler a una luz de estudio, y aprender a utilizarlas te dará una calidad de luz espectacular. Y por supuesto, a menos que sepas de técnicas de iluminación y tengas luces de fotografía externas a la cámara, te pido que te olvides del flash de tu cámara, y del móvil (el flash del móvil debería estar considerado como un crimen contra la humanidad). Son elementos fastidiosos, diseñados para matar todas las posibilidades creativas que tengas. Aquí te dejo una entrada sobre el uso del flash en fotografía por si te interesa investigar un poco más sobre el tema.

Imagina que vas a hacer una foto de tu peque utilizando la ventana de una habitación. Primero, quédate cerca de la ventana para hacer estas fotografías. Tienes tres maneras de colocar al peque con respecto a la ventana.

  1. Frente a la ventana, donde tu peque esté dándole la espalda a la ventana y tú de cara a ella.

  2. De nuevo frente a la ventana, pero esta vez es el peque quien está de cara a la ventana y tú de espaldas a ella.

  3. Y la tercera es que los dos estéis en lateral a la ventana.

Aquí tenéis un diagrama de las tres posiciones con respecto a la ventana, ¡por si os quedaba alguna duda!

Aquí tenéis un diagrama de las tres posiciones con respecto a la ventana, ¡por si os quedaba alguna duda!

Cada una de estas posiciones te dará un resultado muy distinto, y mi consejo es que pruebes todas las maneras. Practica. Tienes tiempo. Mira las diferencias, y considera qué es lo que más te puede gustar. Y si te interesa y quieres saber un poco más, aquí te dejo una entrada del blog sobre la importancia de la luz en fotografía.


En términos generales la que mejor resultado te va a dar es la de colocaros ambos en lateral a la ventana. Y eso es así porque la luz lateral crea una iluminación gradual en el rostro y eso es lo que nos proporciona contornos y relieves (es la manera que en las dos dimensiones de una foto podemos interpretar la profundidad que nos falta). Eso lo sabían todos los grandes maestros de la pintura, lo sabe cualquier fotógrafo retratista y ahora lo sabes tú. Eso sí, trata que la luz no venga directamente del Sol, porque así se te pueden quemar los rostros de las fotos. En caso de que a la hora que estés haciendo el retrato entre el sol a chorros, coloca al peque apoyado en la pared justo detrás de la ventana, verás que luz tan extraordinaria obtienes. Otra opción es usar cortinas, si las tienes blancas y algo translúcidas. Suavizará muchísimo la luz y con ello el retrato. Pero ten cuidado, si la cortina es de otro color que no sea blanco. Fíjate qué pasa en una habitación con una cortina azul… todo se vuelve azulado, incluidos los rostros, así que cuidado con ese detalle.

¿Veis? Está todo inventado ya. Aquí tenéis, a Velazquez, a Vermeer y a Carvaggio metidos en casa haciendo unos retratos espectaculares con luz lateral. Y si os quedaban dudas, mirad como Vermeer hasta dejaba ver la ventana en sus pinturas, y así las…

¿Veis? Está todo inventado ya. Aquí tenéis, a Velazquez, a Vermeer y a Carvaggio metidos en casa haciendo unos retratos espectaculares con luz lateral. Y si os quedaban dudas, mirad como Vermeer hasta dejaba ver la ventana en sus pinturas, y así las hacía todas, y oye, no le fue nada mal.

También es posible que si te colocas muy cerca de la ventana y la luz es muy fuerte la parte del rostro opuesta a la ventana quede muy oscura. Eso lo puedes mejorar de una manera sencilla utilizando un reflector. Solo necesitas una superficie blanca y plana (puede servir una sábana, un mantel, o algo más duro, como un cartón al que le pegas varios folios). Colócalo cerca del rostro en el lado contrario al de la ventana para reflejar la luz (¿lo pillas ahora por qué se llama reflector? y rellenar las sombras. Mira el diagrama que has visto más arriba, ahí puedes ver dónde he colocado el reflector. Si quieres haz una foto con reflector, y otra sin, y verás el efecto. 

Bueno, con una escena así de bonita da igual como lo hagas… pero vamos, aquí lo único que hizo falta es colocar a esta preciosa familia junto a la ventana a la izquierda de la foto.

Bueno, con una escena así de bonita da igual como lo hagas… pero vamos, aquí lo único que hizo falta es colocar a esta preciosa familia junto a la ventana a la izquierda de la foto.

No necesitas mucho más para hacer un perfecto retrato infantil. Pero, ¿existen inconvenientes? Imagina que tienes a dos peques, y los pones uno la lado del otro. O estás haciendo una fotografía de la familia completa. El que está más alejado de la ventana estará bastante más oscuro que el que esté más cerca, y además puede que el más cercano a la ventana esté generando sombras sobre el segundo (esto es más fácil de evitar si los tienes en la pared justo detrás de la ventana, donde la luz está un poco más difuminada). En ese caso es mejor colocarlos de manera escalonada, no en lateral. Cualquier manera que se ocurra de colocarlos que no sea uno al lado de otro te ayudará. Una manera particularmente efectiva y bastante original es cambiar la dirección de la foto. Por ejemplo, hacer la foto de arriba a abajo. Como los peques son eso, peques, puedes hacerles las fotos desde arriba (túmbalos en el suelo, o sentados mirando hacia arriba) y verás que consigues unos resultados que no te esperas. 

Este retrato está hecho desde arriba, con la ventana a la izquierda. Mami aquí además de acurrucarla me sirve para enmarcar la foto.

Este retrato está hecho desde arriba, con la ventana a la izquierda. Mami aquí además de acurrucarla me sirve para enmarcar la foto.

¿Y si quieres probar algo distinto? Bueno, recuerda que te quedan dos posiciones más para probar para hacer retratos. Ambas posiciones enfrentadas a la ventana. Entre las dos opciones particularmente empezaría con colocarte tú como fotógrafa o fotógrafo de espaldas a la ventana y los peques de cara a ella (la posición 2). El problema aquí es que tú hagas sombra sobre el peque y arruines con ello la foto. Parece bastante obvio, pero muchas veces se nos olvida y aparece en la foto la sombra de un brazo sujetando la cámara o el móvil… ¡Error fatal! Asegúrate de que esto no pase antes de explorar esta opción. Para evitarlo puedes moverte un poco hacia alguno de los lados, por ejemplo. Si has conseguido que no te pase puedes hacer fotos sin problemas, aunque ten en cuenta que la luz frontal generará menos graduación de sombras, y por tanto te pueden generar rostros más aplanados. De nuevo, haz todas las pruebas. Es la mejor manera de comprobarlo. La ventaja de este tipo de iluminación es que favorece mucho a los ojos de quien estás retratando. Y esto es por dos motivos, el primero porque llegará más luz a los ojos, y eso siempre favorece, y la segunda es porque al iluminarlos más se cerrarán las pupilas, tendrás más iris y si tienes un bonito color de ojos destacarán más en la foto. 

¡Por favor, mirad qué ojazos!

¡Por favor, mirad qué ojazos!

Y por último, ¿Y si ponemos al peque de espaldas a la ventana y tú de cara a ella? Bueno, pues a menos que seas muy cuidadoso midiendo la luz, lo más probable es que tengas un contraluz muy fuerte, con lo cual, como retrato te quedará muy oscuro. Pero si aun así quieres hacerlo te puede servir para hacer algo más creativo. Todo depende de cómo quieras utilizar ese retrato. Puedes generar siluetas muy interesantes que pueden ayudarte a contar una historia. O, si usas el reflector que construimos antes y lo colocas frente al rostro puedes reflejar mucha luz sobre el rostro. Así consigues efectos muy espectaculares. Todo depende de la luz que se cuele por esa ventana. Por ejemplo, si tienes un sol que entra directo, puedes colocar a tu peque tapando el sol, y junto con el reflector frente a él generar una luz alrededor de la figura súper interesante. 

Aquí no hace falta que os diga donde está la ventana, y el efecto que consigue perfilando este rostro tan bonito.

Aquí no hace falta que os diga donde está la ventana, y el efecto que consigue perfilando este rostro tan bonito.

En definitiva, lo importante es que, hagas lo que hagas, tengas alguna idea de lo que estás haciendo y el por qué lo haces. Pero sobre todo, que juegues, que practiques, que veas los efectos que tiene cada luz en su momento. Con que practiques un poco lo que te he contado aquí tienes para llevarte un rato enorme y conseguir unos retratos muy dignos. 

Ultimo consejo si va a hacer las fotos con tu móvil. Ya sea iPhone o Android, al hacer la foto tocad en la pantalla justo donde esté el rostro de la persona a la que vaya hacer el retrato. El móvil entenderá que para ti la luz en el punto que tocas es lo más importante y medirá la luz para que sea justo ahí la correcta. Es un pequeño detalle, pero el efecto que tendrá en la foto puede ser enorme. 

Esto es todo por ahora. Como te he comentado tienes una continuación a esta entrada de blog otra con ideas para hacer proyectos fotográficos en casa. Y si tienes alguna duda sobre lo que te he contado, si quieres que te explique algo directamente, o si quieres compartir tus resultados conmigo, puedes escribirme, ya sea aquí abajo o mandándome un correo a antonio@caballerophotos.com. Te dejo también el formulario abajo por si te interesa suscribirte y estar a la última de los consejos y actualizaciones que publico.

Y recuerda, estas semanas tendré todo el tiempo que quieras para compartir contigo. Y si puedo echarte una mano para que esta cuarentena se te pase de mejor manera, y conseguir además que mejores tus retratos de familia, me encantará hacerlo. No se me ocurre una mejor manera de ocupar mi tiempo ahora. Y recuerda…¡#quedateencasa!


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